Con 5 perdí la fe en mí, cuando fallé aquel gol.
Con 7 perdí la fe en dios, cuando no salvó a mi periquito.
Con 8 perdí la fe en la humanidad, cuando la televisión mostró muerte, sangre y polvo aquel 11 de marzo.
Con 10 perdí la fe en la educación, cuando aquel profesor inepto me tomó por idiota.
Con 12 ó 13 perdí la fe en el amor, cuando me dejaron.
Con 15 perdí la fe en la esperanza, cuando me cansé de esperar...
Perdí la fe en mí, en dios, en la humanidad, en la educación, en el amor, en la esperanza. Con 10 recuperé la fe en mi persona. Con 16 reafirmo esa fe a costa de lo demás, de los demás. Salvo por eso, he perdido hasta la fe en la fe.
"Aunque tú no lo sepas, me he inventado tu nombre, me drogué con promesas..."
